Representantes estudiantiles de la Universidad de Nariño se reunieron con el alcalde Nicolás Toro para exigir la implementación de la tarifa diferencial en el transporte público. Aunque la Alcaldía respalda la medida, advierte que sin el sistema de recaudo centralizado no es viable.
El encuentro se dio en un contexto de creciente preocupación por las condiciones del transporte público, donde los estudiantes no solo exigen una tarifa preferencial, sino también la congelación del pasaje hasta que se instale el sistema de recaudo centralizado.
Sin embargo, el alcalde Toro advirtió que el municipio enfrenta un obstáculo crítico: los transportadores se han negado a instalar el sistema de recaudo, lo que podría acarrear una multa de $200 mil millones si no se implementa antes del 30 de diciembre. “Nosotros estamos de acuerdo con la tarifa diferencial, pero para eso necesitamos instalar el sistema, porque de lo contrario es imposible garantizar su funcionamiento”, enfatizó el alcalde.
Por su parte, el líder estudiantil Brayan García resaltó la importancia de establecer un fondo de estabilización tarifaria, aprobado por el Concejo Municipal, que permita encontrar fuentes de financiación a nivel nacional, departamental y local. Además, insistió en la necesidad de un estudio tarifario riguroso para sustentar la propuesta y garantizar su viabilidad.

Como conclusión de la reunión, se programó un nuevo encuentro para este viernes 31 de enero, donde participarán las empresas transportadoras. “Si alguna parte no asiste, entenderemos que no hay voluntad y la Alcaldía tomará decisiones”, afirmó Toro.
El futuro de la tarifa diferencial en Pasto sigue en el aire, pero con la presión estudiantil en aumento y la necesidad de una solución integral para el transporte público, se espera que las próximas reuniones sean decisivas para definir el rumbo de la movilidad en la ciudad.
La lucha por la tarifa diferencial sigue su curso. Mientras los estudiantes exigen equidad y mejor servicio, la Alcaldía pone sobre la mesa una condición clave para su implementación. El viernes será un día determinante para saber si los transportadores aceptarán instalar el sistema de recaudo o si la crisis del transporte en Pasto se profundizará.